¡Buenos días, familia!:
¡¡¡Diciembre!!! Estrenamos el mes más mágico del año y lo hacemos con muchísima energía y poniendo mucho de nuestra parte para que la seño acabe como la loca de los gatos hoy, ¡qué intensidad de mañana!
Hoy mis grumetes han realizado el examen de Matemáticas. No lo llevan a casa porque me ha sido imposible corregirlos todos. Mis chicos están rebosantes de energía y pasando bastante de lo que toca… Entiendo que están cansados, estamos a final de trimestre, pero hoy no he conseguido que los 26 se pusieran a leer…Durante el ratito de lectura iba a corregir para que pudieran llevar los exámenes hoy a casa, pero estaba pasando más rato pidiendo a Fulanito y a Menganito que volvieran a su lectura (por no hablar de que hay grumetes que en DICIEMBRE siguen sin traer libro de lectura en la mochila, oh, yeah!) que centrada en los exámenes, por lo que he decidido dejarlo y centrarme en ellos…
Cuando tengáis ocasión de ojearlo, veréis que se trata de un examen muy completo, consta de 10 ejercicios en los que trabajamos todos los contenidos de distintas formas. En clase se han trabajado todos los tipos de ejercicios que han tenido que completar hoy, solo requería concentración y pensar una miajilla. Tengo que decir que que las notas parece que van a ser más bajitas en general (conclusión sacada del vistazo ultrarrápido rápido que he echado y de los pocos exámenes que me ha dado tiempo a corregir) que en el examen anterior, pero también este ha sido más complicado y contiene conceptos más difíciles que cuesta más tiempo asimilar. La semana que viene retomaremos los relojes e incidiremos en las restas con llevada, que es lo que ha salido más flojito. Sin embargo, estoy tranquila porque esto entra dentro de lo esperable. Ya os digo que son conceptos que suelen costar, ¡que no cunda el pánico!
Mañana, ¡a por el de Lengua! 🙂
En otro orden de cosas, os doy un dato curioso: siete grumetes hoy sin cuadernillos… 🙁 Mañana es el último día para entregarlos.
¡Nada más por mi parte hoy, chicos! Sigo con mis grumetes, que en el rato que estoy dedicando a escribiros se están alterando un fenómeno. ¡Ay, qué día el de hoy!
Besicos desinfectados,
Laura.