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Otro día de clase superado y otro examen que nos quitamos de encima. Antes o después, doña Laura nos comunicará qué tal ha salido, que imagino que bien. He visto a doña Carmen Belén y le he preguntado por el de ayer, pero todavía estaba a media corrección y no tengo noticias que daros. Sea como fuere, ahora lo que toca es concentrarse en los de la semana próxima.

De cara precisamente al control de Matemáticas, os recomiendo encarecidamente que todos los días animéis a vuestros hijos a practicar la multiplicación. No solo las tablas, sino multiplicaciones sencillas (números de dos o tres cifras) que os inventéis sobre la marcha. Como pueden ser con o sin llevadas, no hace falta que seáis selectivos con los números que elijáis. Vale cualquiera, siempre y cuando tengan que resolverlas en vertical. Si cada día resuelven tres o cuatro multiplicaciones y se las supervisáis, seguro que el día del examen se sienten mucho más seguros.

El caso es que hoy hemos iniciado los nuevos temas tanto en Lengua como en Matemáticas. Nos hemos limitado a introducirlos, así que no tienen tarea de ninguno de ellos (pero sí llevan una cosilla de Inglés, que no se les olvide). En Matemáticas ya sabéis que empezamos a trabajar la división. Les va a costar, aviso. Dicho esto, les costará aún más si no dominan la multiplicación, así que ahí tenéis otro motivo para que los pongáis a practicar con unas cuantas operaciones todas las tardes. Hoy, que apenas tienen tarea, es un día perfecto para ello.

Cambio de tercio y comento cosillas no curriculares.

  • Siguen apareciendo mochilas mal preparadas en las que faltan libros y libretas (o deberes). Ayuda, please.
  • También asoman por la puerta con poca ropa de abrigo (o al menos eso creo yo). Cuando bajamos al patio, hace frío. Que sí, que ellos se ponen a correr y ni sienten ni padecen, pero cuando suena la campana forman en fila y se quedan parados (al aire libre) unos minutillos mientras esperan su turno para subir por las escaleras. En ese rato, milagroso será si no se constipan. Con abrigo siempre.
  • De vez en cuando veo a alguno de ellos almorzando comida que me cuesta creer que lleven con vuestro consentimiento. Varias veces he visto chucherías, chocolatinas, bolsas de patatas fritas o productos del estilo (a veces enormes)… Elecciones poco saludables, la verdad. Me temo que alguno está metiendo galguerías de estraperlo en su mochila (¿a lo mejor por eso no le caben los libros y se los deja en casa?).

En fin, no os incordio más. Los despistados que hoy han aparecido sin los libros del segundo trimestre de Lengua y Matemáticas, que se aseguren de que mañana no les vuelva a ocurrir.

Un saludo.