Vamos llegando al final de esta segunda semana de curso con el trabajo de los especialistas más o menos en condiciones normales y con el de los tutores capeando las limitaciones de las micro sesiones de 35 minutos.
¿En qué se traduce eso? Pues en que la Música, la Educación Física, etc. se desarrollan como debe ser, mientras que mis asignaturas se van torciendo como un junco para aparecer o no según convenga. Ayer, por ejemplo (no escribí, lo siento, pero ando malucho y estuve fuera de combate por la tarde), deberíamos haber tenido dos sesiones de Matemáticas. Pues ni una dimos. Alargamos las sesiones de Lengua hasta el final del día para poder repartir las libretas correspondientes y empezar a trabajar según las indicaciones que les estoy dando y que los tienen medio locos. Al final, todo les saldrá requetebien, seguro, pero la arrancada siempre es complicada.
En consecuencia, ayer no corregimos la tarea que había pendiente de Matemáticas, cosa que hemos hecho hoy. Y rápidamente han aparecido las primeras libretas con los ejercicios sin hacer. Si no os han dicho nada en casa, podéis comprobar si vuestro hijo está entre los agraciados revisando su libreta de Matemáticas. Hoy las han llevado en sus mochilas con nueva tarea (dos ejercicios del epígrafe de los números de cuatro cifras) y a los que he pillado in fraganti les he dejado la pertinente anotación. No eran muchos, pero alguno había.
Hoy hemos hecho justo lo contrario de ayer; la clase prevista que no hemos dado por alargar otras ha sido la de Lengua. Como ayer les puse dos ejercicios (que muchos se llevaron hechos, pero no todos), los corregiremos mañana. A ver si es esta ocasión no pillamos a nadie en fuera de juego.
Por lo demás, en Inglés hemos avanzado un poquito más en el tema 0, que sirve de evaluación inicial (ay, los números, que no nos acordamos de cómo leerlos) y en Science hemos seguido explicando cositas sobre la geosfera, concretamente sobre el núcleo, el manto y la corteza. Nos hemos quedado justo donde se habla de los minerales y las rocas, mañana lo trataremos.
Y nada más. La mañana transcurre tan rápido que es milagroso que podamos hacer algo de provecho. Un saludo.